Los países de la ASEAN reactivan sus planes de energía nuclear

En el Sudeste Asiático se han lanzado uno tras otro proyectos de construcción y operación de plantas de energía nuclear. Vietnam y Filipinas han reactivado sus programas de energía nuclear en medio de la creciente demanda de electricidad y la descarbonización. La ASEAN no tiene experiencia en la operación de plantas de energía nuclear y buscará asistencia técnica de Rusia, Estados Unidos y otros países. Potencias nucleares como Rusia y Estados Unidos también lo ven como una oportunidad de negocio y se acercan a los países del sudeste asiático.

Vietnam reiniciará su plan de construcción de una planta de energía nuclear suspendido. Se espera que se forme un total de 4 millones de kilovatios de capacidad de generación de energía en dos sitios en la provincia central de Ninh Thuan. Originalmente se planeó construirlo con ayuda de Japón y Rusia, pero se suspendió en 2016 debido al aumento de la deuda pública.

En los últimos años, la construcción de plantas de energía nuclear suele tardar unos 10 años, pero Vietnam se esfuerza por completarla en 2030, el año del centenario de la fundación del Partido Comunista de Vietnam. Se informó que el primer ministro vietnamita enfatizó en la reunión de ese día que «es necesario movilizar todo el sistema político».

El plan de Vietnam para reiniciar la energía nuclear dependerá de los principales países productores de energía nuclear. El primer ministro vietnamita, Pham Minh Chinh, y el primer ministro ruso, Mijail Mishustin, mantuvieron conversaciones en enero y firmaron un memorando de entendimiento para promover la cooperación en el campo de la energía nuclear.

La escasez de energía provoca un aumento de la demanda de energía nuclear

La repentina reanudación del proyecto de energía nuclear se produce en un contexto de agravamiento de la escasez de energía en el sudeste asiático.

El nuevo liderazgo del Partido Comunista de Vietnam, que llegará al poder en 2024, prioriza el crecimiento y espera aumentar la tasa de crecimiento del producto interno bruto (PIB) a más del 10%. Para atraer fábricas de chips y centros de datos como fuente de crecimiento, es imperativo construir un sistema para suministrar de manera estable grandes cantidades de electricidad barata.

Filipinas aspira a poner en marcha una planta de energía nuclear con una capacidad de generación de 2,4 millones de kilovatios antes de 2035. Está previsto poner en marcha la central nuclear fuera de uso de Bataan, en la isla de Luzón, con el apoyo de Estados Unidos y Corea del Sur. Estados Unidos apoyará a los investigadores filipinos que estudian tecnología de energía nuclear, y en julio de 2024 también entrará en vigor un acuerdo para levantar la prohibición a la exportación de materiales y componentes nucleares civiles.

La central nuclear de Bataan fue construida por el ex presidente filipino (padre del actual presidente Marcos) en la década de 1980. El accidente de la central nuclear de Chernóbil, en la antigua Unión Soviética, en 1986, sumado al cambio de régimen en Filipinas, frustró el proyecto de la central nuclear de Bataan. Para la familia Marcos, poner en marcha una central nuclear es un deseo largamente acariciado. El gobierno filipino también está considerando la posibilidad de introducir pequeños reactores modulares (SMR), que se consideran de excelente seguridad.

Las estadísticas de la Asociación de Energía Atómica de Japón muestran que, a enero de 2024, hay más de 430 unidades de energía nuclear en funcionamiento en más de 30 países de todo el mundo. Hay más de 160 unidades de energía nuclear en construcción y planificación. La Agencia Internacional de Energía (AIE) prevé que, con base en las políticas anunciadas por varios países, la capacidad instalada de unidades de energía nuclear aumentará a 1,4 veces la de 2023 en 2040.

La razón por la cual los países de la ASEAN están introduciendo activamente unidades de energía nuclear es que creen que pueden hacer frente al crecimiento de la demanda de electricidad y, al mismo tiempo, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

Indonesia planea introducir unidades de energía nuclear de 250.000 kilovatios a principios de la década de 2030.

Los gigantes de la energía nuclear se acercarán al sudeste asiático en busca de exportar tecnología de energía nuclear. Estados Unidos planea crear un grupo de trabajo sobre la industria de la energía nuclear en Filipinas, y los países del sudeste asiático y empresas estadounidenses mantendrán conversaciones. Además de Vietnam, Rusia también ha expresado su voluntad de brindar asistencia a Myanmar. Corea del Sur también está buscando oportunidades de negocios.

Se ha informado que China ha mostrado interés en introducir plantas de energía nuclear en Indonesia y planea construir una planta de energía nuclear flotante en el Mar de China Meridional.

La ASEAN no tiene experiencia en la operación de plantas de energía nuclear, por lo que no está claro si el proyecto podrá llevarse a cabo según lo planeado. Además de los altos costos de construcción, también es necesario asegurar el talento profesional. Las preocupaciones sobre la seguridad de la energía nuclear también están creciendo después del Gran Terremoto del Este de Japón. Los países tienen diferentes puntos de vista sobre las centrales nucleares, y es posible que se realicen ajustes en función de futuros cambios de régimen y situaciones.